Muy bien lo dice la sabiduría popular: "Nos teníamos que ver con la soga al cuello para que reaccionáramos y actuáramos conjuntamente por una causa común". Es muy duro decirlo, pero así es. Esta fue una de las razones y la de más peso para que todos los taurinos de Colombia trabajáramos articulados para conseguir un mismo objetivo, la legitimidad de nuestros derechos, el respeto a las tradiciones y la reglamentación de las mismas.
Quizá hablar de reglamentación hace algunos años era algo impensable, para nadie es un secreto que los toros los hemos vivido con una pasión absoluta y total desde tiempos inmemoriales, pero que con los nuevos aires que rodean a la sociedad, tradiciones populares tan arraigadas como las corridas de toros, las peleas de gallos y demás, solo por mencionar algunas, no son bien vistas y demás son objeto de ataques, discriminación y degradación, por lo que para hacerle frente a esta problemática, el camino aparente para la solución fue la vía de la regulación.
De todas maneras, sea como sea, este es el camino sobre el que se ha trabajo y sobre el que hay un pronunciamiento de la alta corte, que motiva la articulación y el trabajo en equipo para reglamentar y ajustar las tradiciones. Alguna vez, en conferencia con este medio, el ganadero de Ernesto Gutiérrez, Miguel Gutiérrez, no decía que: "la única forma de salvar las corridas es morigerando cada uno de los tercios, ajustándolos a lo políticamente correcto y obedeciendo el mandato de la reglamentación, para evitar prohibiciones y sanciones."
Gústenos o no, es la vía menos tormentosa que tenemos y aunque, en el orden de la tradición y del rito taurino, las cosas como están, están bien, es de la vía que se nos está marcando para mantener la tauromaquia como parte del espectro cultural de nuestro país. Hay que dejar claro que lo que no se puede permitir es la prohibición, no solo por lo que representa en temas de libertades, derechos y demás, sino porque la prohibición en Colombia, no solo de la tauromaquia, sino de las demás manifestaciones culturales con animales, es la puerta de entrada a la prohibición en otros países y de otras conductas como el consumo de carne, lácteos, entre otros.
El pasado miércoles 3 de abril, todos los integrantes del congreso pudieron ser testigos de la unidad y de la fuerza conjunta que representa la alianza entre todos los sectores culturales atacados y la unificación de criterios en la reglamentación. Esto, aunque no se desarrolló el debate que se tenía programado para comenzar el curso del proyecto impulsado por la Representante a la Cámara, Ana Rogelia Monsalve, y el Representante, Christian Garcés, dejó una impresión en los parlamentarios y ratificó la de la unidad.
Aún no se conoce la fecha de la realización del primer debate, así como tampoco se conoce la realización del 4 debate para la prohibición. Lo que sí se sabe es que las iniciativas ya se están poniendo en marcha, hay reuniones de trabajo, articulación interdisciplinaria, manifestaciones públicas y un respaldo en redes sociales a quienes son los ponentes, para alzar la voz, defender los empleos y las libertades, y también culturizar a los demás parlamentarios en lo que es, lo que tiene y lo que deja la tauromaquia en Colombia.
Redacción de El Minotauro Radio - Daniel Upegui