Tras la apuesta planteada por el torero Morante de la Puebla, de hacer un festival el 12 de octubre en Madrid para recoger fondos para inmortalizar la imagen del maestro Antonio Chenel "Antoñete", ha generado múltiples manifestaciones de apoyo y de respaldo, así como también múltiples comentarios sobre los toreros propuestos para torear dicho festival, nombres como el de Curro Vázquez, Enrique Ponce, Julián López "El Juli" y el mismo, César Rincón, quien a finales de los 90 oficiara como padrino de alternativa del diestro nacido en la puebla del Río y promotor de la iniciativa.
El nombre de César Rincón en quizá uno de los más sonoros y llamativos de los de la baraja presentada por Morante. Y que no es menor tener la posibilidad de volver a ver torear a una figura de la tauromaquia, que conserva aún el record de 4 puertas grandes consecutivas en Madrid el mismo año y un torero de alto impacto en la tauromaquia americana y europea.
La última corrida en Colombia y la de su retiro de los ruedos fue en su plaza, la Santamaría en el año 2008, en un mano a mano con Enrique Ponce, su principal rival, en el buen sentido, durante los años noventa y principios de los 2mil. Desde entonces el torero nacido en lo profundo de la ciudad de Bogotá, se dedico a su ejercicio ganadero, que ya venía desarrollando en Colombia y en España y que ha potenciado como una forma de devolverle algo al animal que le dio todo.
En los últimos meses, el run run de su regreso al toreo por una tarde, comenzó a tomar fuerza luego de ver su constante actividad y tentaderos, publicados en su cuenta de Instagram, lo que comenzó a levantar especulación en los diferentes aficionados del mundo y principalmente de Colombia. Esta actividad constante en redes, que por demás ha sido intempestiva dado su comportamiento mesurado durante años en estos medios, es uno de los detonantes de los comentarios, que hasta ponen a Rincón a sonar como nombre a tener en cuenta en las temporadas colombianas.
Más allá de si Rincón pudiese ser un nombre a tener en cuenta en las ferias como Cali y Manizales, el hecho de volverlo a ver es ilusionante y por demás, un golpe fuerte de opinión, dada su importancia para el mundo del toro y para la tauromaquia colombiana, últimamente vilipendiada y maltratada por quienes manifiestan defender los derechos de los animales.
Que regrese Rincón sería todo un acontecimiento y si lo hace en Colombia, sería un golpe mediático de proporciones mayúsculas, pues regresa el número 1 de Colombia, el hombre que concitó a las calles a todo un país que se sentía representado por un torero y que llevó el nombre de Colombia por todo lo alto, en una época en donde el terrorismo y el narcotráfico era plato principal de las conversaciones internacionales.
Que regrese César Rincón, así se por una o varias tardes, representa la continuidad de un legado y de un testimonio vivo de como el mundo del toro cambia vida y puede abrir las puertas del mundo.
Las especulaciones siguen y los comentarios están a la orden del día, pero lo que sí es verdad y en las propias palabras del torero, "en septiembre podré decir si acepto o declino la invitación de Morante".
Es verdad que está tentado por toda la geografía española, es verdad que se ha puesto el traje corto para torear, es verdad que lo está haciendo público, pero esto no quiere decir que es un hecho, esto quiere decir que está preparando y está midiendo sus capacidades para afrontar este compromiso y volver, porqué no, a triunfar en la plaza que lo llevo de Madrid al cielo.
Solo nos queda esperar y en Colombia, aguardar la esperanza de que podamos volver a ver a este torero y mucho más, para esos aficionados de hueso colorado que gozaron con su tauromaquia y a quienes como nosotros, periodistas jóvenes y aficionados, conservamos un vago recuerdo de sus actuaciones, por cuestiones de la edad y por el desfortunio, en el buen sentido de la palabra, de no haber nacido un par de décadas antes para ver a los más grandes toreros de la historia y el surgimiento del mito del César del torero.
Redacción de El Minotauro Radio - Daniel Upegui.